La empresa matriz de Volvo ha comprado Terrafugia, una de las principales startups de coches voladores. El sector de los coches voladores ha dado así, un importante paso adelante. Después de muchos rumores, la empresa matriz de Volvo ha anunciado la adquisición de Terrafugia, una de las principales startups de creación vehículos voladores fundada por ingenieros de MIT y estudiantes de MBA.
Fundada en 2006, esta empresa lleva fabricando prototipos desde 2009, tiene pensado comercializar su primer vehículo en 2019, y en 2023 pretende tener en nuestros cielos sus primeros vehículos de despegue y aterrizaje vertical.
Vídeo: https://youtu.be/rs8oqYU0YT0
En 2014 la empresa estadounidense presentó el TF-X, un vehículo mitad coche y mitad avión con cuyos prototipos llevan ya tiempo haciendo pruebas de vuelo. Sin embargo, en la web de la empresa aseguran que en sus alas retráctiles tienen pensado ponerle un sistema de hélices para que también sea capaz de despegar y aterrizar de forma vertical.
Las cifras de la operación no se han hecho oficiales, pero en el período previo a la compra, Terrafugia triplicó su número de ingenieros con sede en Estados Unidos, y desde Geely dicen que planean hacer incluso aún más contrataciones para darle fuerza a la empresa.
- El sector del coche volador se anima
Con la entrada de una empresa que tiene entre sus pilares a todo un fabricante de renombre como Volvo, el sector del coche volador empieza a cobrar aún más interés. Y eso que en los últimos meses los proyectos relacionados con la creación de taxis voladores no han parado de crecer: sin ir más lejos, hace sólo una semana Uber se aliaba con la NASA para crear sus propios taxis voladores con la intención de iniciar las pruebas en 2020.
Lo que está claro es que estamos ante una apasionante carrera por llevar al mercado los primeros coches voladores, y parece que es sólo cuestión de unos pocos años que los primeros empiecen a hacerlo. Sin duda estos serán modelos para nada asequibles, pero servirán como prueba de concepto para ver si se puede ir abaratando los precios como lleva unos años pasando en sectores como el del coche eléctrico.